El té podría ayudarte a reducir el riesgo a desarrollar diabetes tipo 2

Jesús Spinola
CEO

La historia del té tiene más de una versión, pero todas coinciden en su punto de inicio: China. Se dice que alrededor del año 2737 a.C., durante el mandato del emperador Shen Nung, nació esta bebida deliciosa. Cuenta la leyenda que una brisa fresca hizo caer algunas hojas de té en un recipiente de agua hirviendo que sería servida al emperador. Una vez que el mandatario bebió esta infusión, le pareció tan novedosa que popularizó la bebida en todo el país.

Las misiones comerciales y evangelizadoras de los portugueses por el continente asiático, llevaron el té a Europa. A pesar de la popularidad y la demanda de estas hojas, tomar té seguía siendo sinónimo de solvencia económica y era un lujo disponible solamente para la élite. 

El amor por el té en distintas sociedades ha sido tan grande que incluso llegó a generar disputas y a consumirse de manera ilegal. Afortunadamente el día de hoy, obtenerlo no vacía los bolsillos y tomarlo no es visto como un acto de rebeldía. 

Gracias a los diversos estudios que se han realizado sobre el té, se han encontrado diversos beneficios para la salud humana. Hace solo unas semanas, se llevó a cabo la junta anual de la Asociación Europea del Estudio de la Diabetes en donde se abrió una discusión importante sobre el posible impacto del té en la prevención de la diabetes


Un estudio revelador 

Las investigaciones de Xiaying Li, un estudiante de posgrado de la Universidad de Ciencias de Wuhan,  determinaron  que tomar, por lo menos, cuatro tazas de los tés preparados a base de Camellia sinensis, podría reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Sin embargo, esto no quiere decir que los resultados sean inmediatos pues para que realmente exista una acción preventiva, se debe seguir este hábito por lo menos durante 10 años. 

Además, el estudio también tiene algunos sesgos, ya que es posible que al consumir la cantidad de té “ideal”  los consumidores eviten bebidas y comidas altas en azúcar y carga calórica. De ser así, esto querría decir que no es que las propiedades del té sean la solución directa, sino que previene caer en conductas de riesgo. Sin embargo, es importante destacar que las infusiones sí tienen propiedades benéficas para el cuerpo humano, especialmente para aquellas personas que viven con diabetes. 

Los polifenoles, se encuentran en las hojas de té y son sustancias bioactivas que impactan de distintas formas en nuestro cuerpo y su funcionamiento. Tienen un poder antioxidante en nuestro organismo y al mismo tiempo, según algunos estudios, tienen acción antiinflamatoria, antitrombótica y antiaterogénica. Esta sustancia se encuentra en los tés negro, verde,  oolong y tés de hierbas, como  menta y  manzanilla. 

¿Cuál es la mejor manera de prevenir?

Al concluir la presentación del estudio, se comunicaron algunas recomendaciones para la prevención de la diabetes. Por ejemplo, hacer ejercicio regularmente, evitar la comida endulzada e incorporar más frutas y vegetales a tu estilo de vida. Igualmente se recomendó no descartar del todo la idea de tomar té, pues esta bebida ayuda a la regulación de la presión arterial y los niveles de glucosa en la sangre. 

Para obtener más información sobre la diabetes tipo 2, te invitamos a que conozcas a Amae. Tenemos planes que se ajustan a ti y a tu estilo de vida, además de que  somos el primer seguro en México especializado en diabetes tipo 2. Sigue nuestro blog, donde encontrarás tips e información relevante sobre diabetes.