¿Por qué la diabetes tipo 2 es cada vez más común en jóvenes?

Jesús Spinola
CEO

Diabetes tipo 2 en aumento entre los jóvenes: Factores desencadenantes del diagnóstico precoz

La diabetes tipo 2 es una condición crónica que se caracteriza por un aumento de los niveles de glucosa en la sangre debido a una resistencia a la insulina o una deficiencia de esta hormona. 

Históricamente, se relacionaba con personas mayores pero,, en las últimas décadas, se ha observado un incremento alarmante de la diabetes tipo 2 entre los jóvenes, especialmente entre los niños y los adolescentes. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que hay más de 1 millón de niños y adolescentes con diabetes tipo 2 en el mundo, y que esta cifra seguirá aumentando si no se toman medidas para generar una cultura de prevención y facilitar el acceso a un estilo de vida más saludable.

En este artículo, revisaremos cuáles son los principales factores detrás del aumento de casos de diabetes tipo 2 en jóvenes, las consecuencias que esot puede tener para su salud y calidad de vida, así como medidas de prevención.

Los factores desencadenantes del diagnóstico precoz

La diabetes tipo 2 en los jóvenes es el resultado de una interacción compleja entre factores genéticos, ambientales y conductuales. Algunos de estos factores son:

La obesidad: Este es el principal factor de riesgo para desarrollar diabetes tipo 2 en cualquier edad, pero especialmente en los jóvenes. La obesidad provoca una inflamación crónica y una alteración del metabolismo que favorecen la resistencia a la insulina. Según datos de la OMS, el número de niños y adolescentes con obesidad se ha multiplicado por 10 en los últimos 40 años, lo que explica en parte el aumento de la diabetes tipo 2 en este grupo.

  • El sedentarismo: La falta de actividad física reduce el consumo de glucosa por parte de los músculos y disminuye la sensibilidad a la insulina. Alarmantemente, el 81 % de los adolescentes no realiza el mínimo recomendado de actividad física diaria, que es de 60 minutos.
  • Alimentación poco saludable: El consumo excesivo de alimentos procesados, ricos en azúcares, grasas y calorías, y pobres en fibra, vitaminas y minerales, provoca un desequilibrio en el nivel de glucosa en la sangre y altera el funcionamiento del páncreas. 
  • Antecedentes familiares. Se ha demostrado que tener un padre o una madre con diabetes tipo 2 aumenta el riesgo de desarrollar esta condición entre un 15 % y un 75 %. Esto se debe a que existen genes que influyen en la susceptibilidad a la resistencia a la insulina o a la deficiencia de esta hormona.

Las consecuencias del diagnóstico precoz

La diabetes tipo 2 en los jóvenes tiene graves consecuencias para su salud y su calidad de vida. Algunas de estas consecuencias son:

  • Un peor control glucémico: Esto se debe a que tienen una menor adherencia al tratamiento, una mayor variabilidad hormonal, una menor educación diabetológica y una mayor influencia de factores psicosociales, como el estrés, la depresión o el estigma.
  • Un mayor riesgo de complicaciones: Un mal cuidado de la diabetes podría desencadenar daños a los ojos, los riñones, los nervios, el corazón y los vasos sanguíneos. Algunas de estas complicaciones incluyen la retinopatía, la nefropatía, la neuropatía, la enfermedad cardiovascular o el pie diabético.
  • Una menor calidad de vida: La diabetes tipo 2 puede interferir en su desarrollo físico, emocional y social, y limitar sus oportunidades de educación, trabajo y ocio. Además, la diabetes tipo 2 puede afectar a su autoestima, su autoimagen y su satisfacción con la vida.

¿Qué se puede hacer para detectar y controlar la enfermedad a tiempo?

La diabetes tipo 2 en los jóvenes es una enfermedad prevenible y tratable. Se recomienda realizar un cribado precoz que consiste en realizar una prueba de glucosa en la sangre a los niños y adolescentes que tienen factores de riesgo para desarrollar esta condición. Esta prueba permite identificar a los jóvenes con prediabetes o diabetes tipo 2 y ofrecerles un tratamiento adecuado.

Recordemos que el estilo de vida saludable es la base del tratamiento de la diabetes tipo 2 en los jóvenes. Esto implica seguir una alimentación equilibrada, rica en alimentos naturales y baja en alimentos procesados; realizar actividad física regularmente, al menos 60 minutos al día; mantener un peso saludable; evitar el consumo de alcohol y tabaco; y dormir lo suficiente.

La educación forma parte importante de un tratamiento de diabetes tipo 2. Recibir educación diabetológica es un proceso que tiene como objetivo proporcionar información, habilidades y apoyo para que el joven pueda manejar su enfermedad de forma autónoma y responsable. Esto abarca aspectos como el automonitoreo, el ajuste del tratamiento, la prevención de complicaciones y  acompañamiento psicológico.

La diabetes como un desafío

La diabetes tipo 2 supone un desafío tanto en investigación como en atención clínica. Los factores desencadenantes del diagnóstico precoz son principalmente la obesidad, el sedentarismo, la alimentación poco saludable, los antecedentes familiares. 

Sin embargo, es posible que mediante educación nutricional y el acompañamiento de un profesional de la salud, se pueda prevenir y disminuir el número de casos a nivel mundial. ¡La prevención es un gran primer paso! Visita el Blog Amae y descubre una serie de artículos que te ayudarán a comprender mejor la diabetes tipo 2, desde sus causas y tratamiento hasta consejos sobre cómo manejar esta condición. Conoce más sobre nosotros y únete a nuestra comunidad.